Aborto de nacimiento
parcial:
20% aborto; 80% infanticidio
¿Qué es el aborto de nacimiento parcial? (D & X)
Este horrible procedimiento se realiza durante el segundo o tercer trimestre del embarazo. El abortista introduce unos fórceps en el útero y, guiado por la ecografía, agarra los pies del bebé y tira de ellos hasta que la parte inferior de la cabecita está expuesta. Luego utiliza unas tijeras para abrir un agujero en la cabeza del bebé, a través del cual introduce un catéter para succionarle el cerebro. Una vez hecho esto, el cuerpo inerte del bebé es "evacuado"1. Véanse las fotos que muestran la realidad sobre el aborto provocado, y del procedimiento de D & X.
¿Por qué existe un clamor tan fuerte ante el aborto de nacimiento parcial?
Porque, aunque todos los abortos son crímenes y no se justifican en ningún caso, el aborto de nacimiento parcial mata a un bebé vivo que está casi completamente fuera del útero de su madre. Se trata de un procedimiento doloroso y brutal que es casi un infanticidio.
¿Cómo es posible que una cosa tan horrible sea legal?
Porque en dos ocasiones el Presidente Clinton ha vetado proyectos de leyes que prohibían este criminal procedimiento. O sea que, debido a ese veto del Presidente Clinton, el aborto de nacimiento parcial se sigue practicando legalmente. Estos proyectos de leyes que prohibían este procedimiento fueron aprobados por la mayoría del Congreso, tanto en la Cámara de Representantes como en el Senado.
¿Por qué hay gente que apoya el aborto de nacimiento parcial?
Porque se ha estado difundiendo una información equivocada al respecto, incluyendo la siguiente:
Eso es falso. De hecho, ningún aborto es necesario para salvar la vida de la madre. De acuerdo con el testimonio de la Dra. Pamela Smith ante el Senado, el 17 de noviembre de 1995: "No hay ninguna situación obstétrica que requiera que un feto que haya nacido parcialmente sea destruido para preservar la vida o la salud de la madre"2.
Eso es falso. De hecho, ningún aborto es necesario para evitar dichas consecuencias. Pero, además, la mayor parte de la comunidad médica está de acuerdo en que NO hay ninguna necesidad médica para realizar este procedimiento. Aun el principal abortista de EE.UU., que lamentablemente favorece también la práctica de abortos tardíos, dice que el aborto de nacimiento parcial nunca es necesario para preservar la salud de la madre3.
Además, y esto es de capital importancia, la manera en que el término "salud" se define legalmente en relación al aborto incluye los factores físicos, emocionales, psicológicos, familiares y sociales4. Esta definición es tan amplia que justifica, desde el punto de vista legal, cualquier aborto. Por consiguiente, si se incluye una excepción por razones de salud en la ley que prohíbe el aborto de nacimiento parcial el resultado sería la anulación de dicha prohibición. El añadir el adjetivo "grave" al término "salud" también haría inútil la prohibición de este horrible procedimiento. Se necesita entonces una ley que prohíba el aborto de nacimiento parcial sin excepción alguna. Esa es la única manera de proteger la vida de los bebitos no nacidos de este brutal procedimiento.
Al contrario, los expertos en medicina afirman que precisamente este procedimiento produce el efecto contrario. Forzar la dilatación de la cerviz de una madre durante tres días y mover al bebé dentro del útero para que nazca con los pies primero puede dificultar que un futuro embarazo se complete5.
Eso es falso. Durante su testimonio ante el Congreso, los principales anestesistas de EE.UU. dijeron que eso no es verdad6. Para que nos convenzamos de la brutalidad de este procedimiento sólo necesitamos leer acerca de lo que vio una enfermera de nombre Brenda Pratt Schafer que presenció un aborto de nacimiento parcial. También nos convenceremos cuando veamos las fotos que muestran la realidad sobre el aborto provocado.
Eso también es falso. Cada año se practican entre 600 y 2,000 abortos de nacimiento parcial. Los que los practican han informado que la gran mayoría de esos abortos se realizan a petición y que el resto de ellos se practican para impedir que nazcan niños incapacitados (lo cual tampoco justifica el aborto en ningún caso)7.
¿Debo o no preocuparme por el aborto de nacimiento parcial en América Latina?
Sí. El aborto ya existe en América Latina. En primer lugar éste se da por el efecto abortivo de algunos anticonceptivos. En segundo lugar, hay por lo menos dos países latinoamericanos en donde el aborto quirúrgico lamentablemente es legal: Cuba y Uruguay. Además, hay otros países, donde el aborto lamentablemente también es legal en ciertas condiciones o en algunos de sus estados o provincias. En Estados Unidos se legalizó el aborto a petición durante los 9 meses del embarazo en 1973. Para la siguiente década ya se estaba desarrollando y luego practicando la horrible técnica del aborto de nacimiento parcial. Si a Estados Unidos le tomó sólo ese tiempo para llegar a este infame procedimiento, ¿quién podrá impedir que los países o regiones de Latinoamércia lo hagan también? La respuesta a esta pregunta es: ¡Usted mismo! Sólo si personas como usted se informan de lo que está pasando en su país o región y luego informan a otros, especialmente a los que están en el poder, es que se podrá saber la verdad sobre el aborto de nacimiento parcial y sobre cualquier otro tipo de aborto, pues a fin de cuentas todos ellos son crímenes contra la humanidad.
Nota: La mayor parte de este informe ha sido tomado del folleto 4/5 es infanticidio. 1/5 es aborto de la Conferencia Nacional de Obispos Católicos de EE.UU., Secretariado para Actividades pro vida. Para más información, diríjase a: Secretariat for Pro-Life Activities, National Conference of Catholic Bishops/United States Catholic Conference, 3211 4th Street, N.E., Whashington, DC 20017-1194 (202) 541-3000. Página Web: www.nccbuscc.org/prolife/index.htm.
Citas: 1. National Right to Life News, 14 de julio de 1993. 2. Testimonio de Pamela Smith, M.D. en U.S. Senate Hearing Report 104-260 (Testimonio del 17 de noviembre de 1995), p. 82. 3. Dr. Warren Hern en American Medical News, 20 de noviembre de 1995, p. 3. 4. Tribunal Supremo de EE.UU., fallo Doe v. Bolton, 410 U.S. 179, 192 (1973). 5. Véase la nota 3. 6. U.S. Senate Hearing Report, 104-260, p. 108. 7. Ibíd., 104-260, p. 23.
Lo que vio una enfermera...
En septiembre de 1993, Brenda Pratt Schaffer, una enfermera recibida con trece años de experiencia, fue asignada por su agencia de enfermeras a una clínica de abortos. Como ella misma se consideraba a favor de una ‘decisión propia' [= a favor de elegir el aborto], no pensó que iba a tener algún problema en su trabajo. Pero estaba muy equivocada.
"Estuve junto al doctor mientras hacía un aborto después de un nacimiento parcial en una mujer que tenía seis meses de embarazo. El corazón del bebé se veía claramente en la pantalla del ultrasonido. El doctor sacó el cuerpo y los brazos del bebé, todo menos su pequeña cabeza. El bebé se movía. Sus pequeños dedos se juntaban, daba de patadas. El doctor tomó unas tijeras y las encajó en la cabeza del bebé, sus manos se desplomaron inmediatamente con una reacción de sorpresa, como lo hace un bebé cuando cree que caerá. Entonces el doctor abrió las tijeras y metió un tubo de succión en el hoyo de su cabeza y le sacó el cerebro. De esta manera el bebé murió.
"Nunca regresé a esa clínica. Pero hasta hoy todavía me persigue el recuerdo de la cara de ese bebé. Era la cara más perfecta y angelical que jamás había visto".
Fuente: La cruz de California, agosto de 1998, p. 12.
La realitat crua i dura del crim de l'assassinat de l'infant no nascut:
Web dels sacerdots a favor de la Vida