EL
PAN QUE YO DARÉ ES MI CARNE, PARA LA VIDA DEL MUNDODOMINGO
XX – CICLO B
20
d’agost de 2006
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Sant Sadurní d’Anoia, Can Rossell, La
Granada i
Castell de Subirats (Parròquia de Sant Pere)
(Homilia pronunciada en català. Traduïda al castellà per Internet)
EL
PAN QUE YO DARÉ ES MI CARNE, PARA LA VIDA DEL MUNDO
“Yo soy el pan vivo bajado
del cielo. Quien come de este pan vivirá para siempre. Más aun: el pan que yo
daré es mi carne para la vida de mundo”.
Y los judíos, como
hubiéramos hecho nosotros, se preguntan: ¿Cómo puede ser esto?
¿Cómo puede éste darnos su
carne para comer?
Jesús hubiera podido responder: “Hablo simbólicamente, evidentemente que no quiero decir que mi carne sea verdadera comida y mi sangre verdadera bebida”. Pero, en cambio, dice precisamente esto: “mi carne es verdadera comida y mi sangre es verdadera bebida”.* Y sabemos que el cristianismo no ha promovido nunca el canibalismo. Aunque ésta fue una de las acusaciones contra los cristianos en los primeros siglos, durante las persecuciones de los paganos. Se decía que los cristianos eran una secta sumamente perversa que se reunía secretamente los domingos, y que en esas reuniones mataban y se comían a un niño. Los paganos habían oído algo del lenguaje difícil de entender de Jesús sobre la Eucaristía y hacían circular esta mentida o calumnia contra los cristianos. Este tipo de calumnias, por cierto, justificaba, a los ojos de los paganos, la persecución contra los cristianos, y el lanzarlos a los leones en el circo romano. Por cierto, los leones y las fieras en el circo si que LITERALMENTE comían y bebían la carne y la sangre de los cristianos mártires.
(PARÉNTESIS: LAS CALUMNIAS DEL CÓDIGO DAVINCI
Esto de calumniar a los cristianos siempre ha ocurrido. Ahora se puede ver en los cines una película, el Código Davinci, que ataca con dureza a la Iglesia Católica. Básicament viene a decir que Jesús tuvo relaciones con Maria Magdalena de la cual nació una descendencia que habría llegado hasta nosotros. El Vaticano, con el Opus Dei como organización secreta, se dedicaría a matar a los descendientes de Jesús, para que los millones y millones de católicos del mundo entero permanecieran malévolamente engañados. Dan Brown, el autor norteamericano, habría finalmente destapado esta maligna conspiración del Vaticano.
Todo evidentemente, una farsa, muy propia del padre de la mentida, el gran enemigo de la Iglesia: el demonio.)
VERDADERO ALIMENTO DE VIDA ETERNA
¿De qué manera, pues,
debemos entender que la carne de Cristo es verdadera comida y su sangre
verdadera bebida?
Son verdadera comida y verdadera
bebida de VIDA ETERNA!! Aquí está la clave de
comprensión. No es la carne mortal que Jesucristo no da, evidentemente, sino su
carne, su cuerpo glorioso, inmortal.
Participando de la comunión
con el pan y el vino consagrados, entramos en comunión con un alimento de VIDA
ETERNA. No lo asimilamos nosotros, como hacemos con el alimento caduco de este
mundo, sino que este alimento bajado del cielo nos asimila a nosotros a la
vida, a la realidad del Cristo Glorioso que ha muerto y ha resucitado por
nosotros y ya no muere más!!
En la Eucaristía el
sacerdote dice en secreto (al mezclar el vino con unas gotas de agua): “Que al
mezclar esta agua con este vino, participemos de la divinidad (eterna) de Aquel
que se dignó compartir nuestra condición humana (frágil y mortal)”.
Comunión TOTAL pues con
Jesús que nos quiere hacer participar de su VIDA: “Os he dicho todo esto para que
tengáis mi ALEGRIA, una ALEGRIA bien llena”. La ALEGRÍA que viene de hacer
siempre la voluntad del Padre: “Mi alimento (aquello que me llena del todo) es
hacer siempre la voluntad del que me ha enviado”.
LA EUCARISTÍA, ESCUELA DEL
AMOR MÁS GRANDE
La Eucaristía es el memorial
del Amor más grande que este mundo ha conocido: el amor de Cristo que, en total
obediencia al Padre (en plena respuesta de AMOR AL AMOR ETERNO DEL PADRE), se
entrega por cada uno de nosotros hasta la muerte y muerte de cruz, para que
tengamos VIDA y VIDA ETERNA. La Eucaristía es pues la ESCUELA DEL AMOR MÁS
GRANDE.
Se nos tiene que notar que
cada domingo venimos a la escuela del amor más grande.
Permitidme una anécdota
familiar. Cuando mis sobrinitas Patricia y Ariadna hicieron, hace unos meses,
su primera comunión, su tío sacerdote les hizo esta reflexión y pregunta: “Hoy,
por primera vez vais a participar del Banquete del Amor de Jesús, que es la
escuela del Amor más grande que este mundo ha conocido. Esto tiene que marcar
un antes y un después en vuestras vidas, Patricia y Ariadna. ¿Qué cosas vais a
cambiar para que se note que, a partir de hoy, sois unas buenas amigas de Jesús?”
Me dijeron que no se pelearían tanto entre ellas y con sus hermanitos más
pequeños y que harían más caso de su mamá, mi hermanita.
Luego, claro está, tuve que
hablar con los papas: “Si les he dicho que la misa es la escuela del amor más
grande y que tiene que notarse en sus vidas que asisten a esta escuela de
Jesús, entonces es importante que vayáis con ellas a misa los domingos (al
menos todos los que podáis)”. Me prometieron que lo harían.
La segunda lectura nos ha
dicho que “corren tiempos malos: no seáis de aquellos que no hacen caso de
nada, más bien mirad de entender qué quiere de vosotros el Señor”. Y en la
primera lectura, hemos escuchado: “Dejad vuestra ignorancia y viviréis y
avanzaréis por el camino del conocimiento”.
Hace años que se habla, en Estados Unidos, de un tímido retorno de las parejas jóvenes con hijos, a las iglesias, tanto católicas como evangélicas. Y la razón suele ser que los papas jóvenes están asustados de cómo sus hijos crecen maleducados por la tele, el internet, los video juegos, la escuela laica, etc. Y piensan: “en la iglesia, aprenderán algo bueno para sus vidas”. ¿Esto que hace años se está dando en EEUU, no está quizás empezando a pasar aquí en nuestro país?
CONCLUSIÓN
Ahora nos disponemos a
celebrar la eucaristía. Con mucho amor y agradecimiento, y admirados por el
gran don de Dios de este misterio, tesoro de la Iglesia, participaremos de la
inmortalidad de Cristo. Tomaremos alimento de VIDA ETERNA en nuestro camino
hacia la casa del padre, donde Dios lo será todo en todos y la muerte ya no
existirá. Que una vez más, este memorial del Amor más grande nos haga vivir con
más amor hacia todos, especialmente hacia los más necesitados y hacia aquellos
que nos cuesta más de amar.
Que así sea.
Mn. Joan Manuel Serra i Oller, prevere
___________________
*Nota:
de la homilía de Mons. Oscar Romero:
"Cuando le entienden mal, Cristo
corrige: el renacer a Nicodemus"
** Palabras del Papa Juan Pablo II, el Grande, en una Jornada Mundial de la
Juventud (Amigo internauta, si sabes la referencia exacta, me la puedes
comunicar?)
(atrás)